11 noviembre 2024
Fuente Universidad de Valencia
Una investigación coordinada por la profesora del Departamento de Geografía de la Universitat de València Carmen Zornoza ha elaborado la cartografía de las inundaciones provocadas por la DANA del pasado 29 de octubre. Esta delimitación aporta la información necesaria para mejorar la gestión de la emergencia, puesto que facilita la evaluación de los impactos, la gestión de ayudas a las personas afectadas y el diseño de propuestas para la reconstrucción de las zonas dañadas. El resultado de este trabajo ha sido incorporado como información de referencia sobre la inundación en el Institut Cartogràfic Valencià dentro de su visor oficial.
https://uveg.maps.arcgis.com/apps/mapviewer/index.html?webmap=8e6c1d2b364f41c79d27e4dcfdf5475a
La profesora Zornoza es parte del grupo INNODES y participa en proyectos relacionados con la gestión y las estrategias de las áreas metropolitanas. En la elaboración también han participado Javier Serrano y Ana Belén Ruescas, del mismo Departamento de Geografía. Serrano ha coordinado las tareas de participación ciudadana y es además investigador del proyecto para el ‘Desarrollo de la resiliencia social ante el riesgo de inundación en un contexto de cambio climático’. La profesora Ruescas, Enrique Portales y Luis Gómez Chova, del grupo Image and Signal Processing, del Laboratorio de Procesamiento de Imágenes de la Universitat de València, han colaborado activamente en la obtención de imágenes satélite y datos postproceso.
La metodología para la creación de la cartografía parte de una delimitación inicial de Copernicus EMS Rapid Mapping, la cual requerió mejoras en varias zonas. Para lo cual, fue necesario combinar técnicas avanzadas de teledetección y participación ciudadana, que permitieron tener un buen conocimiento del área afectada en un corto plazo. Se han empleado datos de múltiples fuentes: imágenes de 2,5 m de resolución proporcionadas por Tracasa Global y el grupo Image and Signal Processing, la detección del barro fue realizada por Yves Julien de la Unidad de Cambio Global de la Universitat y por la información de personas que conocen las zonas afectadas.
Una vez se produjo la inundación era fundamental crear una buena delimitación, para poder conocer la afectación de personas, infraestructuras y servicios. Las informaciones del desastre tienen que tener una buena base territorial para entender el alcance, tanto de la emergencia como de las necesidades de recuperación. “Crear esta cartografía era importante y se convirtió en la forma en la que mejor podíamos ayudar, puesto que tenemos las técnicas y el conocimiento del territorio necesario”, afirma la profesora e investigadora Carmen Zornoza.
La fase de participación ciudadana ha reunido información de entidades locales y personas afectadas, proporcionando datos exactos sobre el alcance de las inundaciones en sus áreas. “Es una primera aproximación, que se perfeccionará con estudios de campo adicionales, pero la información de primera mano de personas implicadas al desastre ha sido fundamental para poderla tener en tiempo récord, solo una semana después del suceso”, concluye el profesor e investigador Javier Serrano.
El trabajo se ha desarrollado con el apoyo de Ana Camarasa, catedrática de Geografía Física y directora del grupo de investigación RIUMED, que desarrolla varios proyectos de investigación financiados tanto por el Gobierno central como por la Generalitat para estudiar las lluvias torrenciales y su afección en los barrancos mediterráneos, como también el desarrollo de herramientas de educación social ante el riesgo de inundaciones, agravadas en el actual contexto de cambio climático.
Acceso al mapa cartográfico de la afección de la DANA, clicando aquí
El Grupo de Investigación en Hidrología Mediterránea (RIUMED) tiene como objetivo el estudio de crecidas en ramblas, que constituye uno de los pilares clave para entender el riesgo de inundación en ambientes mediterráneos.
Las ramblas son pequeñas cuencas, de circulación efímera, cuya configuración está determinada por unos pocos sucesos de alta energía, donde se superan ciertos umbrales hidrogeomorfológicos, que originan los mayores cambios en el sistema fluvial y los principales peligros para el hombre.
Establecer el patrón de riesgo de estas cuencas implica conocer a partir de qué umbrales de lluvia (cantidad, intensidad y distribución espacial) se producen escorrentía (aguas de lluvia en circulación) superficial, y qué umbrales de caudal generan los principales problemas en el llano de inundación. El grupo se dedica a estimar dichos umbrales hidrogeomorfológicos, a partir del estudio detallado de episodios extremos.
El estudio de episodios concretos se basa en los datos del (Sistema Automático de Información Hidrológica) SAIH-Júcar, desde 1989. A partir de estos datos, se ha desarrollado un sistema de almacenamiento y filtrado de la información que permite trabajar a diferentes escalas temporales, desde los cinco minutos a la escala anual. Con estos registros se definen episodios de lluvia y se caracterizan con indicadores de precipitación acumulada, intensidad, duración, torrencialidad, irregularidad y persistencia.
Se analiza el comportamiento de las lluvias extremas para diferentes escalas de observación temporal (5′, 15′, 30′, 1 h, 2h, 3h, 4h, 6h, 12 h y 24h) y su distribución espacial en el territorio de la CHJ. Los máximos se estudian en relación con los factores geográficos de altitud, orientación y distancia al mar.
Asimismo, se estudian los patrones de riesgo en función de los factores de peligrosidad y de vulnerabilidad de la población, atendiendo a su distribución espacial y según las características de ocupación del espacio, en función de patrones temporales (días, noches, horas laborables y días festivos).
Toda la información se cruza con los datos cedidos por los Servicios de Protección Civil y del Consorcio de Compensación de Seguros, con objeto de obtener relaciones entre los indicadores de lluvia y las categorías de daños producidos por los episodios.
Este estudio conjunto nos permite evaluar el grado de adecuación de los umbrales de lluvia vigentes en el Plan Nacional de Predicción y Vigilancia de Fenómenos Adversos, METEOALERTA.
Además, gracias a un Convenio de investigación con la Agencia Valenciana de Seguridad y Respuesta frente a las Emergencias, se analizan los episodios intensos en relación con las llamadas al 1.1.2 CV (con especial atención a las lluvias in situ). Por otra parte, se ha procedido a la elaboración del Mapa integrado de Peligro de Inundación en la Comunidad Valenciana (MIPICOVA) a partir de la integración de la cartografía oficial del Plan Territorial de Riesgo de Inundación de la Comunidad Valenciana (PATRICOVA) y del Sistema Nacional de Cartografía de Zonas Inundables (SNCZI).
En la actualidad se está evaluando el riesgo de inundación en ramblas, en el contexto de cambio climático (considerando las nuevas tendencias en las entradas de precipitación a los sistemas mediterráneos y los hidrogramas de respuesta).
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