Ejercicios de Alegría de Louise Dupré, una respuesta al compromiso con la vida
Marina Lomar
Filóloga
Hasta bien avanzado el siglo 20, predominaba una concepción negativa del envejecimiento en el arte (por no hablar de la sociedad en general). Dicho enfoque negativo ha marcado a generaciones de artistas y, en el caso de los escritores, muchos, como André Malraux, autor de la genial Condición humana, han considerado el tiempo como un cáncer irrevocable que se desarrollaba en ellos. Por fortuna, la manera de abordar el proceso de envejecer evoluciona e incluso tenemos críticos artísticos que hablan del Admirable temblor del tiempo[1] (Gaëtan Picon) para referirse a este periodo a menudo fecundo de la vejez que inspira auténticas obras maestras de arte.
Yo me quedo con el último poemario de la poeta Louise Dupré: Ejercicios de alegría. Donde la poeta, consciente de que el tiempo se agota, decide en este último poemario legar esperanza:
cuentas
sobre tus dedos
los años que te quedan
buscando
a qué resistencia
acogerte
si no es a la vida misma
que quieres aprovechar
hasta la raíz
y regresas
al verbo querer […]
y, sin esperar
ningún auxilio
levantas la mirada
hacia la esperanza del alba
que acoges
en tu palma
Esperanza y escritura, porque, « ¿qué queda cuando ya no queda nada? »La respuesta se forma entre los pliegues de la piel y del texto. Permanece la inefabilidad de la felicidad, pero, sobre todo, queda el poema:
El poema resucita
palabras
asesinadas
deposita claveles
sobre la desgracia [….]
El poema es una oración
secreta
una noche que desea
hacer oír
las óperas del pasado
[….]
Por eso, hasta el final, elijo escribir y acoger en mí el presente, el mundo, para enraizarme del mismo modo en él. Escribir cada día la palabra alegría al igual que Louise, y ser hasta el final una mujer de deseo. Porque el deseo es movimiento, dicen los filósofos, y es voluntad de vida según Schopenhauer:
A pesar del desgaste de tus rodillas
todavía sabes caminar
y permanecerás hasta el final
una mujer de deseo
que levanta a cada paso
la belleza
dormida bajo el polvo
el deseo es un horizonte erguido
(Louise Dupré, Exercices de joie, 2022 : 97)
[1] Publicado en 1970, François-Marie Deyrolle de las ediciones L’Atelier contemporain lo reeditó, en 2015.